lunes, 30 de junio de 2008

De la editorial tradicional a la independiente, pasando por muchos hitos

¿Qué hacer para publicar una novela? Lo primero, obviamente: escribirla. Una vez con ella, dejarla macerar en un cajón unos dos meses, luego recuperarla, releerla, cortarla, trincharla sin remilgos hasta dejar una obra perfecta y entregarla a algún amigo en quien confiemos (literariamente hablando claro está). ¿Luego qué? Si estamos seguros de que lo que tenemos entre manos merece ser compartido, si en verdad nuestra novela está a la altura de cualquier otra que nos guste, porque que no se engañe nadie, la novela que escribamos necesariamente tiene que gustarnos a nosotros primero, podemos embarcarnos en la difícil tarea de hacer que llegue a las estanterías de las librerías y superficies especializadas. Ojo, si realmente no estamos convencidos de que merece ser publicada, si nosotros que la hemos parido no creemos en ella, nadie lo hará, así que este punto es el más importante. Si este proceso, nada fácil y mucho me temo que imposible para algunos, ya está realizado, por favor, siga leyendo.

Yo intenté publicar una novela (y subrayo que era una NOVELA porque este texto está orientado a la publicación de novelas y no de cualquier otro género literario) y esto fue lo que me encontré:

EMPRESAS DE SERVICIOS LITERARIOS

Con lo primero que me tope fue con las empresas de SERVICIOS LITERARIOS. Muy válidas para un cocinero que quiere compartir con su familia los secretos de sus fogones y se plantea el sorprenderlos con un recetario en el que en la portada está la foto de primera comunión de su hija pequeña. O para un carpintero que amplía el negocio y por navidad les entrega a sus empleados un recopilatorio de chistes relacionados con el serrín, la caladora o el martillo. Pero estos servicios literarios no nos sirven de nada a las personas que estamos seguras de que hemos escrito una cosa seria, al nivel de otras cosas serias que leemos en nuestro tiempo libre, incluso a veces, estamos seguros de que nuestra novela supera a algunos premios literarios que se anuncian con todo tipo de remolinos de fuego y demás espectáculos pirotécnicos. Estas empresas de SERVICIOS LITERARIOS se aprovechan de la ilusión de muchos, te dicen “Tu novela editada en 72 horas” o “vende tu obra sin intermediarios”. Ellos nos editan la obra sin ISBN y sin depósito legal, en realidad lo que hacen es IMPRIMIRNOS la obra cobrándonos el doble que uno imprenta. ¿Cual es la diferencia entre ambas? Que en las empresas de SERVICIOS LITERARIOS nos llaman AUTOR, nos hacen creer que somos escritores, que tenemos talento. Nada más lejos de la verdad: ni siquiera leen nuestros trabajos. En simple mecánica de cadena fordiana, tú les mandas el archivo de tu libro en PDF, ellos te cobran, te mandan ese archivo convertido en libro con tapa dura, fresado y calentito para que “usted mismo lo venda”. Un negocio redondo que juega con los sueños de muchos. ¿Cómo reconocer a estas empresas de SERVICIOS LITERARIOS? Fácil, pongan en Google “publicar manuscrito” o algo por el estilo y les aparecerán muchas en las zonas de enlaces patrocinados. Podría decir nombres de muchas de ellas, pero prefiero no hacerlo porque sería caer tan bajo como ellas, que incluso utilizan palabras como “escritores noveles” para captar la atención de las mentes más débiles.

AUTOEDICIÓN

Hay personas que ya sea porque tienen medios propios, ya sea porque piden un préstamo, llegan a la conclusión de que ellos se convertirán en editores para sacar su obra, que se autoeditarán y se darán todo lo que se merecen. Gran error. La mayoría de periódicos o revistas especializadas tienen por norma no publicar reseñas ni comentarios de obras autoeditadas. Al contrario de lo que sucede en la industria discográfica, que de vez en cuando un disco autoeditado llega a las listas de más vendidos, en la industria literaria ninguna distribuidora se molestará en llevar nuestra novela a las librerías. Es duro pero es así. Y después de mucho razonarlo creo que es lo mejor para el autor y para el mundo del libro. ¿Qué sucedería si cualquier se publicase y apareciese en las librerías? Puede que me equivoque, pero estoy casi seguro de que veríamos muchas faltas de ortografía y la sintaxis de la lengua castellana fuertemente castigada. (Y ahora, permitanme que me ría, pues ¿qué es un blog sino una autoedición electrónica? En mi defensa, decir que aquí tratamos de publicar una novela y no cualquier cosa).

EDITORIALES TRADICIONALES Y AGENTES LITERARIOS

Me permito la licencia de unir a Editoriales Tradicionales y Agentes Literarios porque, como vengo diciendo, este texto es un poco una crónica de mi andadura, y en ésta, ambos vinieron juntos. Como dice Manuel Pimintel (sí, exministro de trabajo de España en época de Jose María Aznar, pero también escritor y editor) “el editor de hoy no podría vivir sin agente literario y viceversa, de manera que tendrán que aprender a convivir juntos”.

¿Qué es un Agente Literario? Es lo que a la industria musical un MANAGER. O sea una persona que representa los derechos de otra ante terceros. En este caso, un Agente Literario se encargaría de conseguir las mejores condiciones para su cliente, el Autor, frente a la Editorial. Es famoso en España el célebre caso de Carmen Balçels, pionera de los Agentes Literarios, de sus negociaciones con editoriales salieron entre otros, Vargas Llosa, García Márquez, Isabel Allende y un largo etcétera de los pesos pesados de la literatura en castellano. Ella contribuyó como nadie al endiosamiento de un buen número de escritores, otorgándoles el estátus de (que nadie se enfade por la comparación) estrellas de rock. Pero ¿por qué surgieron los Agentes literarios? Así las Editoriales Tradicionales (nombre que doy a las Editoriales con larga trayectoria) están optando (obviamente siguiendo el modelo americano) por el filtro de seguridad que les ofrece un Agente Literario, que claro está, nunca gastaría su tiempo en representar a un Autor en el que no creyesen.

¿Cómo hacerles llegar nuestra novela a un Agente Literario o a una editorial? Me permito transcribir (resumidamente) parte de una carta que me dejó otro conocido Agente castellano-parlante, Guillermo Schavelson:

Hay escritores que están convencidos de haber sido rechazados, en más de una editorial, sin que su obra haya sido leída. Y es cierto. Las editoriales rechazan –muchas veces sin mirar— la gran mayoría de los materiales que reciben, y esto se debe a la enorme cantidad de manuscritos que les llegan cada día, sin que el autor se haya tomado el trabajo de preparar la información de una manera conveniente para que la puedan considerar.

Muchas de las desagradables experiencias de rechazo, son en buena parte consecuencia de no saber cómo presentar un proyecto o un manuscrito a una editorial. El encontrar un agente o un editor, que a veces resulta tan difícil, es algo que se puede resolver escribiendo. Nuestra propia experiencia de más de 35 años en el mundo del libro, nos muestra que las formas más efectivas para lograrlo, son todas por escrito.

Sabiendo cómo vender un proyecto o un manuscrito, las posibilidades de llegar a un contrato y ser publicado aumentan notablemente. Es importante saber utilizar los procedimientos habituales en el mundo internacional de la edición, para presentar una propuesta editorial.

Es habitual creer que sin una recomendación personal no se consigue nada. Y no suele ser así; es más, la “recomendación personal” es un recurso del que se abusa tanto, que los editores no lo toman muy en cuenta.

Los editores están siempre sobrecargados de trabajo. Cuando un escritor que quiere publicar consigue una entrevista personal con un editor gracias a una recomendación, se está produciendo a sí mismo un daño. Porque el editor lo recibirá por compromiso con quien lo recomendó, y el escritor desaprovechará esa oportunidad hablando de algo que el otro no conoce ni tiene interés en escuchar. Al final le dejará un manuscrito que –en la mayoría de los casos—, irá a parar a una pila de descarte. En el mejor de los casos, le será devuelto unas cuantas semanas después con una carta más o menos amable de rechazo.


Cuando la prestigiosa editorial norteamericana Doubleday decidió, hace varios años, no aceptar más manuscritos que no sean de los autores de la casa o que provengan de agentes literarios reconocidos, estaba recibiendo 10.000 manuscritos no solicitados al año: 45 por cada día de trabajo.

Una propuesta por escrito, bien hecha, tiene muchas más posibilidades de lograr aceptación, y de llegar a un contrato de edición. “La Propuesta” o “La Propuesta Editorial” (“Editorial Proposal”, en la jerga internacional de la edición), es como se denomina lo que el escritor envía al posible agente o editor, para interesarlo por un manuscrito o un proyecto. La Propuesta consta de una serie de informaciones clave sobre el autor, la obra y el público al que va dirigida, que no tienen que ocupar demasiadas páginas, y cuya elaboración no es ningún desafío para quien fue capaz de escribir un libro entero.

La presentación
La presentación a una agencia literaria o a una editorial, consta de dos etapas:

1.La Carta de Presentación
2.La Propuesta Editorial

La Carta de Presentación es una primera comunicación escrita, de una página como máximo, presentándose usted y su libro o proyecto de libro, en la que se pregunta al agente o al editor si tiene interés en recibir una Propuesta más amplia.

La Carta de Presentación ahorra muchísimo tiempo, frustraciones y dinero. Si un agente o una editorial no responde a la misma, usted se habrá ahorrado hacer una copia completa del manuscrito y los gastos de correos, ya que de enviarlo tampoco hubiera recibido atención.

La Carta de Presentación
El principal desafío es cómo llamar la atención de agentes o editores que están sobre-demandados, faltos de tiempo, y que reciben una gran cantidad de propuestas, además de la suya.

Si bien no hay una receta que garantice el éxito, la experiencia muestra qué conviene hacer y qué no. Lory Perkins, una exitosa agente de Nueva York, hace algunas sugerencias muy concretas para escribir una Carta de Presentación:

Nunca envíe una carta de presentación de más de una página. Doscientas cincuenta palabras tienen que ser suficientes para presentarse a usted mismo y a su libro. Llevo vendidos más de 2.000 libros y nunca envié a un editor una carta de más de una página. Si me sale más extensa, la reescribo.
Busque provocar una clara y sencilla primera impresión. Escriba lo imprescindible.
No envíe cartas manuscritas, que dificultan la lectura. Escriba con una tipografía legible, en cuerpo 10 a 12, ni menor ni mayor, sin adornos ni colores, son todos gestos de aficionado que no impresionan a ningún editor.
No intente ser original o gracioso, a menos que esté ofreciendo un libro de humor, y esto sea parte de su presentación. Usted está buscando una relación profesional, no un intercambio entre amigos.
No le diga al agente o al editor a quien ni siquiera conoce, cuánto lo respeta o lo admira. Los elogios injustificados no ayudan con los profesionales serios.
No olvide agregar sus datos completos: nombre, dirección, teléfono, e-mail y horarios para recibir llamadas. Se sorprendería del número de escritores que olvidan incluir sus datos en las cartas, y es imposible responderles.

La Carta de Presentación para una obra de ficción y una de no-ficción, no difieren demasiado. Por lo general, las de no-ficción deben ofrecer más información sobre el autor, ya que sus antecedentes suelen ser definitivos para lograr la contratación.

Cuando un agente o un autor presentan una novela a un editor, cuando el editor la presenta a sus comités editoriales y cuando la editorial la presenta a los libreros, cuanto más sintética es la presentación, mejor.

Peter Rubin, agente literario, dice que la mejor sinopsis de una novela es una larga frase, porque muestra que ambos, -el autor y la novela-, están bien enfocados. Y agrega contundente: “si un escritor es incapaz de describir su novela en una frase, probablemente a ese libro le falte bastante trabajo.”

En síntesis:
Nunca envíe manuscritos. Comience enviando una Carta de Presentación a quien le interese como agente o editor. Tenga preparada La Propuesta para enviarla de inmediato, si se la solicitan. Si le responden que no interesa, o no le responden en una a dos semanas, siga enviando la Carta de Presentación a todos los agentes o editores que usted piense que se pueden interesar. Si prefiere enviar a varios agentes y/o editores al mismo tiempo, indique claramente en la carta que está haciendo un envío simultáneo a varios.


La Carta de Presentación debe contener:

1.Destinatario con nombre y apellido correcto.
2.Una breve presentación del autor (datos significativos como escritor, no su historia personal).
3.Un párrafo de descripción del tema o argumento.
4.Alguna mención del público al que el libro está dirigido (nunca ponga “para todo público”, porque eso no existe, y el editor creerá que usted no piensa en los lectores).
5.Alguna estimación sobre “el mercado”. (“Hay 5.000 estudiantes de cine en España”, o “la novela tal sobre un tema similar vendió treinta mil ejemplares en México”, etc.).
6.Información determinante para la promoción del libro (“tengo una cátedra de 1.500 alumnos”, o “escribo diariamente en varios diarios del interior”)
7.Su nombre, dirección, teléfono y e-mail. Si no tiene correo electrónico, es hora de tenerlo, saque uno gratuito. Un escritor que no usa esta tecnología será considerado como alguien extraño en una editorial.

La Propuesta Editorial consta de:

1.Autor y título del libro.
2.Una sinopsis argumental de la novela (2 a 3 páginas) o del libro que usted quiere escribir si es de no-ficción (muchas veces estos libros se escriben cuando ya hay un editor interesado). Este texto tiene que dar un panorama general de su obra.
3.El índice, en especial si se trata de un libro de no-ficción.
4.Una muestra de escritura: uno o dos capítulos, no más de 15 páginas en total.
5.Información relevante sobre usted y su obra anterior, si ya ha publicado. En este caso, conviene agregar un ejemplar.
6.Libros comparables. Muestre que conoce lo que ya se ha publicado y que tenga algo similar al que usted propone, y explique por qué su libro es diferente. (1 página).
7.Información “de mercado” (1 página). Esto se refiere a quiénes serán los compradores de su libro. Si se trata de un libro de no-ficción, en Internet se puede obtener muchísima información (por ejemplo cuántos periodistas hay en el país, el número de miembros de cualquier organización profesional, cuánta gente viaja por año a Brasil, etc.) Si se trata de una novela, describa a qué tipo de lector se dirige, quiénes son, qué otros libros leen, etc.
8.Información útil para promoción (uno o dos párrafos); por ejemplo sus contactos en los medios si los tiene, o el número de alumnos, o las organizaciones o grupos a que está vinculado, tanto en el país como en el exterior.
9.Prensa: si usted ha tenido notas de prensa, críticas o entrevistas publicadas, agregue cuatro o cinco, no más. Elija las más representativas. Una crítica moderada de un gran diario puede valer mucho más que un elogio de un medio menor.



CONCURSOS LITERARIOS

No sé cuanto dinero me habré gastado en fotocopiar novelas y enviarlas a concursos. Es difícil y desalentador, sobre todo cuando se vive en el mundo del enchufismo y del tongo. El propio Schavelson, fue conocido en Argentina por propiciar mediante artimañas deshonestas que Piglia, su representado, ganara el Premio Planeta de ese país.
A pesar de ello, estoy convencido de que es posible ganar algún concurso sin contar con un “amigo” en el jurado. Lo que sí es importante es saber elegir el concurso, estoy convencido de que LOS DETECTIVES SALVAJES de Roberto Bolaño nunca habría tenido opciones de ganar ningún concurso que no fuera el premio Herralde, este es un claro ejemplo de saber elegir un concurso. Los autores noveles hemos de mirar los concursos dedicados a nosotros, a primeros textos. Sólo por la publicidad y la cobertura de los medios, merece la pena intentarlo. Un consejo, no intente ganar el Premio Planeta, no lo digo por que pueda repetirse la acción de Schavelson, lo entenderá repasando los últimos nombres de este premio: Juan José Millás y Álvaro Pombo; autores más que consagrados que no hacen más que promocionar de una editorial a otra gracias al premio; ¿otro nombre del Planeta? Boris Izaguirre.

LAS EDITORIALES INDEPENDIENTES

Existen en la actualidad, un gran número de editoriales independientes que, muchas veces, no buscan grandes ventas si no la satisfacción personal de sus editores, en su mayoría apasionados por los libros que creen que éste o aquél título merece la pena editarse. Muchas de ellas, se dedican en exclusiva a reeditar o traducir grandes hitos de la literatura contemporánea, como es el caso por ejemplo de “cabaretvoltaire” www.cabaretvoltaire.com que basa su catálogo en los grandes escritores franceses del siglo XIX y XX. Otra vertiente muy en boga en España es la edición en nuestro país de escritores lationamericanos que no han tenido la oportunidad de publicar en las grandes firmas.

Publicar en una editorial independiente no es sinónimo de poca categoría, esto no es fútbol, en la literatura, al menos en cuanto a calidad se refiere, no podemos hablar de primera, segunda o tercera división en función del dinero que se invierte en fichajes. Miren por ejemplo a Candaya www.candaya.com , pequeña ediorial que saca una novela o dos al año, en el 2006 sacó un título, NOCILLA DREAM, que convirtió al autor en un grande, de hecho tan grande se ha vuelto que la segunda parte de este NOCILLA DREAM ha visto la luz en Alfaguara.

En la página web de muchas de ellas se invita a que los autores noveles dejen sus manuscritos, así ocurre con www.morsa.es, dedicada por entero a publicaciones “especiales” con ilustraciones. También con www.pielagoeditorial.es jovencísima editorial, con una página mediocre (hasta la fecha al menos), todo hay que decirlo, que nos invita a que enviemos “novelas de calidad” sin ningún tipo de impedimento. Yo les envié una carta de presentación y me contestaron extensamente, diciéndome porqué mi novela no era de su línea, algo que, creanme, nadie se molesta en hacer, al menos no tan detalladamente.

Para terminar les dejo una lista de editoriales independientes:


CANDAYA. www.candaya.com
VEINTISIETELETRAS. www.venintisieteletras.com
CABARETVOLTAIRE. www.cabaretvoltaire.com
SALAMANDRA. www.salamandra.info
DVD. www.dvdediciones.com
SALTO DE PÁGINA. www.saltodepáginas.com
CABALLO DE TROYA. www.editorialcaballodetroya.es
MELUSINA. www.melusina.com
MORSA. www.morsa.es
ABADA. www.adabaeditores.com
BAILE DEL SOL. www.bailedelsol.org
EL ALEPH. www.elalepheditores.com
PiélagoEditorial. www.pielagoeditorial.es

Ojalá estas palabras le sirvan a alguien para que su manuscrito salga del cajón y entre en los corazones de muchos buenos lectores.

Acetona

viernes, 27 de junio de 2008

OBJETIVO

Acabo de fundar este espacio con el sólido propósito de arrojar algo de luz a todos aquellos que han escrito una novela y no quieren ni dejarla en el cajón ni gastarse dinero en una mala publicación que no leerá nadie.